3/2/12

Don't surrender!

Miraba hacia delante, lo único que podía distinguir era un diminuto brote de claridad al final del camino. Entre tanta oscuridad y tanto tiempo de tieniebla llegó a divisar algo que creía ya inexistente: luz al final del camino. En el mismo momento en el que se dio cuenta, se prometió a sí mismo que nunca más volvería a mirar hacia atrás, hacia ese recorrido interminable por el que tanto había deambulado, solo se preocuparía por alcanzar ese chispa que tanto había buscado y que ,por fin, había encontrado. Ahora empezó a creer, a confiar, a soñar... y conforme se alimentaba con todos esos detalles, más se iba acercando a lo que, algún día, pensó imposible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario